Saturday, November 26, 2005


Fluffy, el perro de tres cabezas: ¿único en el mundo?

Todos hemos visto la película de Harry Potter y la Piedra Filosofal. Ahí podemos ver a Fluffy, un enorme perro de tres cabezas. Pero este no es el único perro con tantas cabezas que se ha inventado en toda la historia. En la antigua Grecia también hubo otro, conocido como Cerbero, un perro con tres cabezas que también guardaba algo, como Fluffy: la entrada a los infiernos. Si algún alma quería escapar, sus tres cabezas siempre vigilantes la atrapaban con sus mandíbulas.
Como podemos ver, Fluffy no es un personaje totalmente nuevo e inventado, sino que ha sido recogido de un mito, como tantos otros que ya veremos. Esta no es la única coincidencia que tienen Fluffy y Cerbero. Si estuvimos un poco atentos a lo que dijo Hagrid, comprobaremos que dice "Sí, es mío, se lo compré a un griego hace un año y se..." un griego... ¿quizás algún mago poderoso sacó al terrible Cerbero del infierno y lo vendió? No podemos saberlo a menos que J.K. Rowling invente en su libro que sí fue así o que no fue así.
Otro detalle que nos lleva a lo mismo es cómo burlaron a Fluffy (para los desmemoriados se lo recordaremos: en el libro fue tocando una flauta, aunque los productores de la película decidieron sustituirlo por un arpa). Y no es coincidencia que en vez de flauta fuera arpa: una antigua leyenda de Grecia dice que cuando el héroe griego Orfeo perdió a su amada Eurídice, decidió descender hasta los infiernos para recuperar su alma y devolverla a la vida. Orfeo era un semidiós que tocaba el arpa tan bien que hasta las piedras lloraban; así que en vez de recurrir a la fuerza, tocó una canción de su lamento tan dulcemente que conmovió y adormeció a Cerbero y hasta al mismo dios de los infiernos. Pero no terminó bien: Orfeo acabó perdiendo otra vez a Eurídice por culpa de su impaciencia, al girarse a mirarla antes de salir del Inframundo.
Como vemos, esta leyenda es lo que explica que Fluffy se durmiera al sonido de la música, en vez de ser el típico amansamiento que estamos acostumbrados a oir.
En resumidas cuentas: Fluffy no es ninguna invención sino una copia de una leyenda que bastantes de nosotros conocemos, pero que nunca nos hemos parado a pensar en ello.